Ontem foi o Ano Novo Judeu. Qual, não faço ideia, realmente não estou dentro do assunto. Hoje, vi o seguinte cartaz na rua, a celebrar o Ramadão:

Lisboa não tem o tamanho de Buenos Aires, mas talvez a variedade de tradições já requeira uma abertura maior que aquela que há (pelo menos, que havia quando me vim embora) e que praticamente se restringe às celebrações cristãs ortodoxas. É um bom começo, mas é preciso fazer mais.
1 comentário:
Lamentablemente la multiculturalidad ha traido otras facetas mas desagradables del asunto. Desde aquellos atentados a entidades judías en Buenos Aires también ha dado paso a la desconfianza hacia los árabes.
También las situaciones desagradables hacia los inmigrantes de otros países de América Latina que parecen olvidar que sus padres y abuelos vinieron con las mismas ilusiones y ganas de trabajar.
En mi familia hay un poco de todo, belgas, franceses, españoles, algunos árabes, mi esposo tiene mezcla indígena, mi mejor amigo es judío... todavía tengo esperanzas de que todos podamos convivir sanamente en esta hermosa Argentina.
Enviar um comentário